Couture Animals

No tenía muchas ganas de hacer esta entrada. En verdad, no tenía muchas ganas de nada hace algunas horas.

Quiero que sepan que yo no quiero poner mi ideas políticas ni nada de eso en mi blog, creo que enfoca a otro punto de mi vida y me gusta que se quede así. Es por eso que lo que escribiré a continuación trataré de hacerlo lo más objetivo posible, dejando de lado todos mis pensamientos para que así nadie se sienta agredido ni mucho menos. Sin embargo, necesito contarlo, ya que este blog es una especie de "diario de vida", y esto es algo sumamente relevante que me sucedió, aún más que cualquier cosa que hayan leído acá.

Desde el jueves he participado en los cacerolazos de la Plaza Ñuñoa, junto a más de 400 vecinos, niños, adultos y abuelos, pero todos los días nos vimos reprimidos por una violencia policial injustificada.

Ayer sábado venía de celebrar con el novio nuestro aniversario y decidimos que si o si teníamos que ir de nuevo a cacerolear. Todo estuvo en orden, una fiesta ciudadana con batucadas y bailes, hasta que a las 23:30 los carabineros, al igual que los días anteriores, comenzaron a disperzar a la gente, tirando agua del guanaco de una manera exagerada. A las 24:00 quedabamos casi todos, menos los niños y ancianos. Todos permanecimos ahí por nuestros derechos al igual que los otros días. Más tarde se llenó de carabineros la plaza, se hicieron detenciones arbitrarias (detuvieron a un chofer por tocar la bocina en apoyo) y no se podía circular libremente. Todo empeoró cerca de las 1 de la mañana, cuando quedabamos cerca de 100 personas y la represión se volvió insostenible.Seguimos caceroleando pacíficamente (y quiero que eso quede claro, no hubo ningún desmán ni altercado durante todas esas horas, los tres días, por parte de la gente), cuando el guanaco comenzó su actuar junto a los carabineros. En ese momento el Fabián (o el novio) se me perdió, y tuve que seguir con una amiga corriendo. Quedábamos cerca de 50 personas y los carabineros nos superaban ampliamente en número. Irarrazaval estaba desierta, y no podíamos escondernos del agua así que nos pusimos junto con otras 10 personas aprox. detrás de un kiosko. El guanaco se puso justo en frente de este, y con su máxima potencia tiró el agua. Todos estábamos muy asustados, porque si uno se caía o no se cubría bien iba a quedar muy mal. Cuando vimos para el lado, notamos que venían hacía nosotros a menos 10 metros cerca de 20 carabineros, por lo que nos asustamos y muchos comenzamos a correr. Apenas salimos del resguardo del kiosko, el guanaco nos apuntó y por la presión del agua todos caímos al piso, chocando entre nosotros y la pared. En el piso nos siguieron lanzando agua, mientras los carabineros se acercaban. Intenté pararme unas tres veces, y cuando vi que a la chica que estaba a mi lado se la estaban llevando algo así como una fuerza divina me levantó y corrí con todas mis fuerzas. Llegué a la esquina y vi como a los chicos que se habían caído conmigo se los estaban llevando, eran más de 5.

Estaba toda empapada, muerta de susto y sola. No noté que me dolía el cuerpo porque el miedo y la adrenalina era mayores. Cinco minutos después el Fabián me llama para decirme que estaba detenido, que se lo llevaron porque estaba solo con otra chica corriendo del guanaco, el cual los mojó y estando en el piso, los carabineros los tomaron. Llegué a mi casa muerta, me sentía peor que nunca. Me metí a la ducha con todo y ropa (claramente daba lo mismo) y cuando salí, noté que mi cara tenía tres moretones. Tenía dos chichones, uno en la frente y en la pera (al chocar contra la pared) y un ojo morado. No podía caminar, ya que en ambas rodillas tenía heridas y chichones del tamaño de un huevo, literalmente.Además de moretones en todo el cuerpo.

Al Fabián lo soltaron a las 5 de la mañana, y gracias a no se quién no le paso nada. Sin embargo, me contó que llevaron a tres chicos, de no más de 16 años que venían sangrando, totalmente golpeados y esposados (a él no lo esposaron).

Hoy no he podido caminar por los dolores en mi rodillas, además de que todo el cuerpo me duele demasiado.

No digo estas cosas para decirles que todo esto lo hacemos por la lucha y todo ese bla bla,. sino para exponer la violencia y represión que se ha visto, al menos desde el 4 de agosto y que no se ha detenido.

Supongo que ya much@s de ustedes han visto los videos de los carabineros reprimiendo los cacerolazos en distintos puntos de Santiago, sino, les recomiendo que los vean, para que así tomen conciencia de lo que está sucediendo en el país.

Sin ánimos de crear polémica ni nada, me despido. Sin ganas de subir hoy lo que usé ayer, sin embargo lo subiré mañana, después de todo, de eso se trata este blog jajaja.

Por favor, les pido conciencia respecto a esto. Creo que no tiene que ver con nada político, esto es netamente algo social. Estamos frente a la posibilidad de un gran cambio, un cambio histórico del cual podemos ser los protagonistas.